Mientras tanto los delincuentes hacen de las suyas y aprovechan la oscuridad para robar lo poco que queda, en tanto que los trabajadores petroleros se encuentran desprotegidos.
Moloacan Ver
Lázaro Cruz García
Más de un mes tiene que el campo Cuichapa y El Plan se encuentran sin energía eléctrica debido a que un transformador quedó fuera de operación.
Es decir, ya no sirve y por lo consiguiente los delincuentes han aprovechado esta situación para robar lo poco que queda, debido a que ambas zonas permanecen en penumbras.
Peor aun, de día los trabajadores petroleros sufren de calor y no rinden, por las noches es peor, ya que se encuentran desprotegidos y así tienen que laborar peligrando sus vidas.
De la misma manera, al no haber energía eléctrica por lógica no hay sistema en oficinas de atención, lo que retrasa todo tipo de trámites tanto a los trabajadores como a sus familias.
Petróleos Mexicanos, no quiere invertir un sólo peso para comprar un transformador nuevo, cuyo precio esta entre el millón y medio y dos millones de pesos por su capacidad.
Así mismo, dos mandos de confianza, en este caso los ingenieros Felipe de Jesús Zarate y Jesús Herrera Barbosa, no han hecho nada por gestionar y resolver con la administración la problemática que se tiene.
Si bien es cierto, la empresa federal no ha cumplido con el pacto laboral al cien por ciento, les da lo que quiere a los trabajadores y eso que a medias, aparte de que no se preocupa por mantener en óptimas condiciones sus instalaciones.
En pocas palabras para Pemex todo es ganar, sin importar como tiene a sus trabajadores, por ello, las demandas muy serias que enfrenta constantemente.
Por último, es importante mencionar que el síndicato petrolero al cual se encuentran adheridos los trabajadores afectados que carecen de todo, ha hecho lo que corresponde.
Sin embargo, al patrón parece no importarle y continua en su misma postura de no invertir, de no gastar, lo que podría propiciar a qué los trabajadores se harten más de lo que ya están y opten por parar labores.